El pastel de manzana de Nathalie es un relato de Carla Montero que se basa en historias reales de los «bâtards de Boches», más de doscientos mil niños nacidos en relaciones entre soldados de Alemania y mujeres francesas durante lo que fue la Ocupación de Francia en la época de la Segunda Guerra Mundial.
Como sucede en cada mañana de su vida, Nathalie reluce su pastel de manzana. Inmediatamente el rico aroma dulce de la masa recién retirada del horno circula por las calles de Saint Martin sur Meu, quitando sonrisas a su paso. Al levantar la vista, sus ojos se encontrarán frente a otros, con una murada nueva, extraña, tan azul como la lavanda de la fachada de madera del Café Patisserie Maison Blanchard. Luego de semejante desconcierto, la protagonista recuperará su sonrisa. No obstante, ese hombre desconocida no se la devuelve, sino que esconde su mirada y se va con la cabeza gacha y manos en los bolsillos.